Gonzalo Álvarez Maldonado, referente de la Mesa Nacional de la Carne por Coninagro, analizó la situación del sector cárnico argentino y cuestionó la falta de políticas activas por parte del Gobierno nacional. En diálogo con Elonce, el dirigente se refirió al impacto de las importaciones, los cambios en el consumo y los desafíos para la producción en Entre Ríos.
Respecto a las importaciones recientes, Álvarez Maldonado explicó: “Hasta el momento, ha habido pequeños cupos de importaciones, principalmente carne de Brasil a un bajo precio, pero no ha tenido ningún tipo de incidencia”. Recordó que «en la década del ’90 también hubo importaciones de carne a la Argentina. En Entre Ríos, importamos carne del país hermano de Uruguay. Es una carne excelente e igual a la de nosotros».
Sobre la situación del sector, señaló: «Desde la década del ’70, estamos alrededor de los 50 millones de cabezas vacunas. En la del ’70 éramos 25 millones de argentinos. En la del ’90, ya estábamos cerca de los 40 millones. Tuvimos una pérdida mucho más importante en 2008 con el conflicto del campo, donde perdimos dos o tres millones de cabezas de ganado, que ahora se han ido recuperando».
Álvarez Maldonado fue crítico con la falta de acompañamiento estatal: «No ha habido política activa. Cuando digo que no ha habido política activa, no estoy hablando de subsidios o compensaciones, sino fomentar un sector de la producción argentina que, en la época de crisis sociales y políticas, fue el primer eslabón que se salió».
También cuestionó la carga fiscal sobre el sector: «El sector agropecuario, entre las políticas activas, tiene una alta carga positiva. La energía no tiene la carga impositiva que tiene la carne».
En relación al Gobierno de Javier Milei, expresó: “Del lado de la política veo que hay intenciones buenas, pero cuando se llega a los momentos de los lugares del poder, el poder encandila”. Y agregó: “Necesitamos de una política productivista y una reforma fiscal de fondo para todos los argentinos, donde los que menos tengan, paguen menos, y los que más tengan, paguen más”.
Sobre el consumo interno, detalló: «La producción ganadera y bovina en Argentina, el 70% de lo que se produce lo consumimos los argentinos. Solo el 30% es lo que se exporta. Hoy, de ese 30%, el 70% lo consume China. Es carne que no consume el argentino: las vacas manufacturas, la conserva. Ellos, por su cultura y alimentación, la utilizan para degustarlas en sus sopas».
Finalmente, se refirió a los cambios de hábitos alimentarios y la infraestructura rural: “Hubo un cambio de hábito donde la juventud trató, influenciada por los medios sociales, de consumir otras carnes, pese a que la vacuna tiene toda la proteína”. Y concluyó: «Entre Ríos tiene más de 130 mil kilómetros de caminos de tierra y solo hay 2.000 y pico pavimentado. El camino no es solo para la producción, es para la educación y la salud».