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Laura Albarenque, coordinadora de Educación de Jóvenes y Adultos de Paraná Campaña, se refirió en La Tarde Informativa a la modalidad virtual que debieron adoptar durante el aislamiento social para continuar con el dictado de los talleres y cursos de capacitaciones en oficios. Se mostró “esperanzada” en que el departamento pueda volver a la presencialidad pronto.

“Nadie podría haber planificado algo para esto”, consideró Albarenque en relación a las imposiciones del contexto de la pandemia. Pero valoró que “las mejores herramientas que tuvimos fue la capacidad de adaptación, la creatividad y la voluntad de cada persona que conforma la Coordinación”.

La funcionario repasó que ante la necesidad del aislamiento y distanciamiento, “buscamos todas las estrategias posibles para estar cerca del estudiante y la comunidad. Desde el capacitador y las coordinadoras locales, todos estuvieron con mucha incertidumbre, preocupación y desconcierto, pero construimos un proceso, acudiendo a las herramientas que algunos sabían manejar”.

Aprovechar la virtualidad

A pesar de las dificultades, Albarenque afirmó que en la Coordinación ven la enseñanza virtual “como una oportunidad, una bisagra y un antes y después en el ámbito de la capacitación laboral. Estamos pensando en seguir adelante con estas modalidades de apoyo teconológico”.

“Si bien la presencialidad es lo más fuerte y la práctica requiere de ella, estamos haciendo este proceso”, aseguró.

“La gente se inscribió para la presencialidad. De repente las personas de oficios: carpinteros, albañiles, electricistas, soldadores, modistos, auxiliares en pintura y manualidades, todos oficios que se basan fundamentalmente en la práctica y el trabajo manual, tanto capacitadores como estudiantes tuvieron que adaptarse muy rápidamente”, recordó la educadora.

En cuanto a la adaptación a los soportes tecnológicos, Albarenque contó que “las personas que se inscribieron, jóvenes, pero adultos en su mayoría que en su mayoría no usaban la tecnología como un medio de aprendizaje, sino de comunicación, grupos familiares o amistosos, no formales. Tuvieron que aprender”.

“La mayor dificultad con la que nos encontramos, más que el desconocimiento, es que la herramienta tecnológica: celular, notebook y conectividad, que no está resuelta en todas las zonas”, advirtió la funcionaria.

Finalmente, la coordinadora departamental de Educación de Jóvenes y Adultos dijo que en el área “estamos esperanzados de que en Paraná Campaña vamos a poder volver al modo presencial, con todo el protocolo y los cuidados que debemos tener, y tal vez en grupos reducidos. Pero es necesario para la práctica de los oficios contar con el acompañamiento y supervisión del capacitador”, concluyó.