Desde el portal de la fundación Eco Urbano dieron a conocer la información sobre la presencia inédita de cianobacterias, microorganismos que liberan toxinas perjudiciales para la salud humana y que tornan de color verdosa azulada las aguas en los ríos Paraná, Uruguay y de la Plata, hacen prever un “verano complicado”, en especial en los balnearios, informaron desde el Ministerio de Ambiente de la Nación. La cartera federal comenzó un estudio científico para “mapear la presencia y distribución de esos microorganismos y elaborar sistemas de alerta temprana”, se indicó.
En este sentido, el viceministro de Ambiente, Sergio Fedorovisky, aseguró a Telam que se tomaron “muestras en el Río de la Plata desde la costa de San isidro hacia el Delta”, que permiten “decir que la situación es preocupante”. Y agregó: “Hay una floración de cianobacterias inédita para esta época del año” dijo.
Aguas en peligro
El funcionario consultado dijo también el Consejo Federal de Entidades de Servicios Sanitarios (COFES) que agrupa a las empresas proveedoras de agua potable le adelantaron que cuentan con tecnología adecuada “para garantizar la ingesta de agua”. Y a aseguró que “en algunos balnearios habrá que prohibir la pesca o los deportes acuáticos, les estamos transmitiendo a los municipios un protocolo para que establezcan la prohibición de ingreso al agua si fuera necesario”.
Federovisky detalló que lo que desencadena esta proliferación de cianobacterias es “multi causal” y aseguró que normalmente afloran «en temperaturas altas y cuando el agua esta quieta”, como en estos momentos de una baja de caudal histórica y prolongada en el río Paraná y Uruguay.
“El cambio climático, la contaminación creciente y la bajante histórica del Paraná, hace completar un coctel ideal para que estas cianobacterias exploten este verano”, dijo el viceministro, aunque “si no hubiera bajante del Paraná no habría esta presencia inédita”, sostuvo.
El viceministro indicó, además, que el agua corriente que sale de las canillas “es segura” y que la detección de estos microorganismos es visual, por lo que independientemente si el municipio actúa o no prohibiendo el acceso al agua “hay que abstenerse de hacerlo”.
La toma de muestras del Rio de la Plata “indican que hay toxicidad”, por lo que “hay que abstenerse de meterse al agua cuando este de un color azul verdoso ya que es muy probable la adquisición de toxinas que tienen consecuencias neurológicas y hepáticas”, precisó Federovisky.
En el operativo conjunto liderado por la cartera ambiental participaron Prefectura Naval Argentina, junto con técnicos, técnicas e investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET).
Detalles
El estudio a campo mencionado es de carácter interinstitucional y binacional en aguas argentinas y uruguayas del Río de la Plata. Tuvo lugar este miércoles, como continuidad de las acciones de control y monitoreo desplegadas por la excesiva floración de cianobacterias en la mencionada cuenca. “Su finalidad fue recabar datos e información de calidad de agua, radiométricos e imágenes satelitales que sirvan como insumos para la delimitación de sistemas de alerta temprana frente a la problemática”, se indicó desde Ambiente.
“Los trabajos se orientaron a analizar las floraciones planctónicas de cianobacterias y de diatomeas en el Río de la Plata a través de la obtención simultánea de datos de calidad de agua —mediante tomas de muestras—, radiométricos e imágenes satelitales. Ello servirá como información de base para la elaboración de mapas de presencia de floraciones de dichos microorganismos, que permitan estimar su distribución en la cuenca y contribuir a la delimitación de un sistema de alerta temprana. Asimismo, los datos obtenidos son claves para explorar y profundizar sobre las posibles causas y los orígenes del fenómeno”, se precisó.
Tóxicas
Las cianobacterias se distinguen por su coloración verdosa, son microorganismos capaces de realizar fotosíntesis y se nutren de la materia orgánica presente en el agua. Dado que liberan toxinas al medio en el que se encuentran, pueden constituir una amenaza para la salud humana y ambiental. Algunos factores significativos que explican su inusual proliferación son las sequías y bajantes acontecidas en diversos cursos de agua; la contaminación vertida con motivo de la actividad antrópica, que resulta concentrada por los inferiores caudales de agua existentes; y las altas temperaturas estacionales y por los impactos del cambio climático.
Con información de Télam.
De la Redacción de ERA Verde