«Desde Diamante y para todos el mundo, el doctor Domingo Liotta es un maestro de generaciones. Su sabiduría, dedicación y trabajo revolucionó la medicina y la ciencia cuando hace 50 años creó el primer corazón artificial que todavía hoy está vigente en todos los quirófanos del mundo», expresó el gobernador Gustavo Bordet tras visitar al médico en su hogar.
«Hablar con él y sus hijos fue un gusto enorme y un orgullo. Médico personal del ex presidente Juan Domingo Perón fue también ministro de Salud en su última presidencia y ocupó diversos cargos públicos en nuestra provincia, siempre en defensa de la salud pública», dijo Bordet.
Domingo Liotta nació en Diamante, y en 1949, obtuvo el título de médico cirujano de la Universidad Nacional de Córdoba. Una vez graduado, se dedicó a la docencia, a la investigación y a prestar servicios en diversos hospitales. Luego viajó a Estados Unidos y trabajó en Houston, Texas, durante 10 años. Allí dirigió el equipo que desarrolló e implementó la primera bomba intracorpórea de asistencia circulatoria en un ser humano en 1963, y marcó un hito en la historia de la medicina al reemplazar el corazón de una persona por uno artificial en 1969
El gobernador lo visitó junto a su esposa Msriel y su hija Delfina en la casa donde reside el médico cardiocirujano. “Este encuentro es la posibilidad de tener una charla informal para conocer varios aspectos de la vida del doctor Domingo Liotta, además de la importancia que 50 años atrás trabajara, estudiara, diseñara y colocara el primer corazón artificial en un mundo en el que recién asomaba la biotecnología. El doctor fue un adelantado en ese sentido, y también porque es entrerriano”, remarcó tras encontrarse con el médico y su hijo Patrick Liotta.
Mencionó que ocupó el cargo de secretario de Ciencia y Técnica, y destacó las gestiones para que Entre Ríos tenga sedes del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet). “Se ocupó de que Entre Ríos tenga justamente dos sedes del Conicet. Una en Diamante, y la otra en Concordia donde funciona Comisión Administradora para el Fondo Especial de Salto Grande (Cafesg)».
Para Bordet «esto habla claramente que, además de las ciencias médicas, de la ciencia y la tecnología ha tenido un compromiso permanente con nuestra provincia, y nosotros como entrerrianos, en mi caso como gobernador que me toca representar a los entrerrianos, estamos orgullosos de la tarea que ha hecho el doctor Domingo Liotta. Tener esta charla también representa un homenaje por lo mucho y bueno que ha hecho por nuestra provincia, y que todavía sigue haciendo. No sólo por la provincia, sino por el país y por la humanidad», remarcó.
En tanto, por su parte, el doctor Liotta consideró muy «honrado de tener la visita del gobernador, su esposa y una de sus hijas, con quienes hemos pasado momentos muy gratos». En cuanto a los trabajos con el presidente Perón, mencionó al Sistema Nacional Integrado de Salud del sistema sanitario que «desgraciadamente fue anulado y derogado por el gobierno militar, y hasta ahora no se ha podido tener en el país un sistema de salud» así.
«La visita del gobernador Bordet, de quien conocía a su padre cuando era intendente de Concordia, es muy honrosa. Es una persona de una gran sencillez y sentido humano de la vida. Creo que Entre Ríos tiene gobernador para rato tal como veo las cosas, y le deseo la mejor suerte en ese sentido», sostuvo.
Por su parte, el hijo reconocido médico cardiocirujano y emprendedor cultural, Patrick Liotta, dijo que «son 50 años de un hecho histórico y único que cambió la humanidad en las ciencias médicas. Hoy miles de personas se benefician por ese invento y ocurrencia en un momento donde a nadie se le ocurría porque era alocadísimo poder hacer en 1960 un corazón artificial».
Recordó que su padre hizo los prototipos en la Argentina, en la universidad de Córdoba, y lo presentó en Estados Unidos, «logrando un impacto inmediato en la gente cuando logra la sobrevida de 13 horas en perros. Era mucho. A partir de ahí, desarrolla dos fabulosas piezas de bioingeniería que son asistencia cardíaca mecánica en el año 62, y en el 1969 implanta el primer corazón artificial total con éxito en un paciente en trance de morir. Un hombre que no tenía otra opción y ese paciente sobrevivió. Hoy se cumple ese aniversario. Sobrevivió increíblemente bien. Fue una bomba que funcionó. Le demostró al mundo el poder de los intelectuales también de Argentina», sostuvo.
Comentó que «esto está en una muestra que se llama Tesoros de la historia americana, junto a la bombita incandescente de Thomas Edison, al primer cronómetro y a la primera computadora. El corazón Liotta-Cooley está en la Smithsonian Institution de Washington. Diseño de él, obviamente desarrollado en Estado Unidos porque lo contratan y él comparte los créditos con Denton Cooley, un médico increíblemente talentoso y un gran amigo de él. Un héroe de la medicina, pero el diseño original fue de este argentino que lo tenemos acá y que a los 95 años sigue trabajando», finalizó.