#EntreRíos #Salud #Balance
En el Aula Magna del hospital Escuela de Salud Mental, la ministra de Salud, Sonia Velázquez, realizó un balance de gestión junto a su gabinete ampliado. En la oportunidad también se establecieron las prioridades de cara al inicio del 2020.
En el marco del asueto administrativo la ministra de Salud, Sonia Velázquez, convocó a su gabinete a una reunión desarrollada en el hospital Escuela de Salud Mental. Allí, realizó un repaso de los ejes más significativos de la gestión 2019 y trazó los lineamientos iniciales del nuevo período 2020. Durante el encuentro participaron, además, los directores de los hospitales San Martín y Materno Infantil San Roque de Paraná y de los principales centros de atención primaria de la capital entrerriana.
Ante los equipos que coordinan las áreas sustantivas de la cartera sanitaria provincial, la titular de la cartera sanitaria puso en relieve el lugar elegido para el encuentro en la tarea de significar y resignificar las prácticas colectivas sanitarias: el hospital Escuela de Salud Mental. “Esta institución se inició en 1963 con otra denominación (hospital Dr. Antonio Roballos) y es el escenario elegido para dar una señal simbólica desde lo institucional: salir de la estructura de línea y venir a un efector con un largo recorrido de trabajo”, afirmó. Asimismo expuso que el último día del 2019 interpela la reflexión. “Poder estar con ustedes, y entre todos, es una manera de despedir un año y un devenir muy difícil para todo el sector Salud”.
Velázquez reflexionó: “Quizás la crisis social, económica, política e institucional que nos atravesó a nivel país se manifestó mucho más en esta etapa, pero hemos pasado varias: en 2001, los 90, 1989, los federales; y estas instituciones mantuvieron el contrato social con la comunidad y sobrevivimos porque nos sostiene lo colectivo y cada acción de los trabajadores y trabajadoras de Salud, tanto en la clínica como en el territorio”.
La ministra remarcó que mucho se habló del modelo neoliberal. Y en este marco analizó: “El modelo neoliberal se compone de prácticas muchas veces fragmentadas y aisladas –sin contenidos, antisolidarias y antisororas– que las reproducimos quienes estamos al frente de las políticas públicas”. Acto seguido anticipó una etapa de construcción en el contexto de una batalla cultural para salir de los enunciados y “poder trabajar nuevos modelos de atención y organización de un sistema de Salud que tenga que ver con el componente de derechos: la inclusión, la equidad y la accesibilidad que tanto pregonamos como paradigma”.
La titular de la cartera sanitaria instó a “deconstruir muchos modelos que se nos han arraigado en los últimos 30 años, entendiendo que cada uno de nosotros somos una construcción histórica y necesitamos volver a forjar más el compromiso con el otro y pensar críticamente lo que hacemos todos los días”.
Velázquez apostó a nuevos desafíos: “La reestructuración del Ministerio de Salud partiendo de revisar los modelos de organización en cuanto acomponentes y contenidos de normativas todavía vigentes pero vetustas que no tienen nada que ver con una atención primaria renovada”.
Por último concluyó: “El sistema sanitario está en crisis y no por falta de recursos financieros: invertimos millones de pesos –un tercio– orientados a paliar la atención de población por enfermedades crónicas no transmisibles; hemos legislado por patologías; grandes compañías farmacéuticas han encontrado en este perfil epidemiológico, nacional y latinoamericano, un nicho importante para poder seguir realizando pingues negocios para sus arcas financieras y nos olvidamos de la atención primaria de la salud renovada que nos tiene que atravesar con el desafío de prepararnos para la salud y no para la enfermedad”.